Por Staff Azturismo/Fotos Araceli Martínez Rose
En plena temporada navideña, las calles y plazas de ciudades alemanas como Frankfurt están vacías, desoladas como muestran las imágenes compartidas por la periodista tijuanense, Araceli Martínez Rose.
La plaza Römmer, ícono de Frankfurt, Alemania, perdió el bullicio de residentes y turistas que mantenían siempre ocupada su superficie.
En el primer día de confinamiento decretado en el país ante el incremento en el número de casos por COVID-19, está emblemática e histórica plaza está desierta.
Sus edificios históricos, como el Römer (Ayuntamiento), y casas típicas no son el fondo para la tradicional foto. Sus numerosos bares y retaurantes están cerrados, todo porque la gente desatendió las medidas para enfrentar una pandemia letal.
El confinamiento terminaría hasta el próximo 10 de enero, aunque las autoridades analizarán en su momento si se alarga aún más.
Tan sólo ayer, la nación germana reportó mil decesos más, en total suman más de 23 mil asociadas al virus desde que inició la pandemia
Recientemente la canciller alemana Angela Merkel, en un mensaje muy emotivo, dijo que no podríamos permitir que fuera ésta la última Navidad con los abuelos, cuando un gran sector de la nación de 80 millones de habitantes se rehusaba a respetar el confinamiento medio, ahora hay confinamiento estricto y los informes preocupantes de los hospitales indican que parece que finalmente hay consciencia ‘del enorme riesgo’ de fallar en este confinamiento o de abusar de la amnistía navideña de 2 días para que sólo 2 familias se reunan sin sobrepasar 8 adultos.
La periodista radicada en Alemania comentó que la gente está muy resignada a estar encerrados, y más por el incremento de muertes.
Reportes de prensa señalan que ya hay al menos un hospital desbordado por la cantidad de pacientes con COVID-19.
Así, diciembre de 2020 se recordará en Alemania como un mes con luces navideñas y sin gente dispuesta a admirarlas en su paso por las calles.